Si te digo magnum y hablamos de vino seguro que sabes que me estoy refiriendo a una botella con un contenido de 1,5 litros. Pero, ¿sabes la medida que indica, por ejemplo, un jeroboam?
Al igual que existe esa referencia de tamaño, hay más medidas con nombres própios.
La lista completa sería:
- el octavo: de 9,4 cl (en desuso)
- el cuarto: de 18,75 ó 20 cl, que en España se denomina «benjamín»,
- la media: 37,5 cl
- el medium: 60 cl (en desuso)
- la botella: 75 cl

- el magnum: 1,5 L (2 botellas)
- el jeroboam: 3 L (4 botellas)
- el réhoboam: 4,5 L (6 botellas)
- el mathusalem,: 6 L (8 botellas)
- el salmanazar: 9 L (12 botellas)
- el balthazar: 12 L (16 botellas)
- el nabuchodonosor: 15 L (20 botellas)
- el salomón: 18 L (24 botellas)
- el souverain: 26,25 L (35 botellas)
- el Primat: 27 L (36 botellas)
- el melchizédec: 30 L (40 botellas)

Para que os hagais idea de los tamaños, la Salomon tiene una altura de 75 cm, una circunferencia de 70 cm y llena pesa 25kg.
Si os apetece daros un capricho podeis comprar una botellita de Chateau Haut-Brion embotellado en el 2000 y calificado primer cru en formato balthazar por, tan solo, 4000$.
Insignificante dinero comparado con la botella de Burdeos Château d»Yquem de 1811 por la que un hostelero de Bali ha pagado 84700€.
Vanneque, propietario del establecimiento SIP Sunset Grill en Bali, que se inaugurará en septiembre, se declaró encantado de haber adquirido esta “joya».
“Esta botella será un elemento central para mi nuevo restaurante”, afirmó
No sabemos si porque tras ese desembolso no le habra quedado dinero para terminar de montar el restaurante o porque con el menu obsequiara una foto personalizada sujentando la botella.






que fue leída por su colega el profesor Armand Gautier y publicada en forma de artículo al año siguiente. Y del mismo modo que sucedió con el trabajo esencial sobre máquinas térmicas de Carnot o el de geometría no euclídea de Friedman—que puso los cimientos para comprender la estructura del universo—, el trabajo de Maillard pasó desapercibido. Incluso el mismo Maillard no se dio cuenta de su alcance aunque tuvo la intuición de que había topado con algo importante: «Las consecuencias de estos hechos me parecen importantes no sólo en fisiología y patología humanas, sino también en fisiología vegetal, agronomía, geología. La sola enumeración de estas consecuencias sería demasiado larga».
tan característico, recuerden que es producto de la reacción de Maillard, que tiene lugar a las altas temperaturas que alcanza la grasa y casi no se produce al hervir los alimentos.




















































Tras un largo debate hemos sentado la base de desarrollo del evento público que se llevara a cabo el